CORDOBA

San Marcos Sierras: el lugar que eligen los viajeros de todo el mundo




San Marcos Sierras es un pueblo pequeño y con encanto ubicado en el partido de Cruz del Eje, en el noroeste de la provincia de Córdoba, Argentina. Se encuentra al final del circuito turístico del Valle de Punilla que recorre la ruta número 38.



Sara de 19 años, proveniente de Israel, Moni 23 años de Colombia, Martin 29 años de España, y Jean 31 años de Francia, son algunos de los que pasaron, conocieron y se enamoraron de San Marcos Sierras. Como ellos, muchos viajeros que llegan al pueblito se quedan y permanecen algunos meses cautivados por el entorno natural y mágico, por sus calles de tierra, y una vida rica en relaciones y vida comunitaria. La permacultura, la huerta, y la búsqueda de prácticas espirituales hacen de San Marcos Sierras un lugar distinto en la provincia de Córdoba. Cuatro de cada diez jóvenes que llegan a San Marcos Sierras es extranjero. La edad promedio de los visitantes es de veintiséis años y la estancia promedio es de treinta y dos días.

Un poco de historia
Los primeros pobladores son las comunidades comechingones, uno de los pueblos originarios de este territorio. Es así que aún se conservan morteros realizados por estos en las márgenes del río San Marcos Sierras entre otras manifestaciones de la cultura de los comechingones de esos tiempos. San Marcos Sierras es un pueblo que en la década del sesenta, fue junto a El Bolsón, el lugar elegido por los jóvenes para vivir en un entorno natural, lejos del consumo y pujantes por realizar experiencias de vida comunitaria. (Son los primeras manifestaciones de los movimientos Hippies en la Argentina). Hoy la población está conformada por descendientes de los pueblos originarios, a los que se los reconoce como nativos y otro tanto de personas que proviniendo de distintas ciudades de Argentina y el mundo, decidieron afincarse en este pueblo con encanto, por su paz, lejos del mundo y del consumo. La mayoría de las personas que decidieron quedarse a vivir lo hicieron luego de pasar por San Marcos sierras en el contexto de sus experiencias como viajeros.

Los ríos del pueblo 
Dice el poeta “La libertad no es el río, es el agua”. Son dos los ríos que bañan el pueblo y sus límites. Uno, el más pequeño en el centro del pueblo, ideal para recorrer caminando su margen hasta llegar por la quebrada hasta el dique antiguo o el viejo Molino de la época jesuita. Y el otro es el Río Quilpo, caudalosos y profundo en ciertas partes. Hay tres campings donde se puede acampar abonando las entradas a los mismos. El más agreste y natural es el tercero de ellos que se llama Reserva Natural Tres Piletas, que permite tirarte de lo alto de sus piedras a una olla profunda o bien nadar en una de sus piletas naturales. En el Quilpo especialmente al atardecer se puede ver gran cantidad de tortugas de agua y otras especies de río, Como también grandes iguanas entre sus calientes piedras y gran cantidad de aves llenas de clores y sonidos. Otros lugares recomendables son el Vado de López, donde se puede acampar o pasar el día sin necesidad de abonar entrada, aunque no hay ningún servicio disponible, en verano hay una pequeña despensa con bebidas, quesos de cabra y panes artesanales. No podes irte de San Marcos sin conocer Casa de Piedra otro lugar magnifico con restos de pinturas rupestres hechas por los pueblos comechingones hace siglos.

 

“Si quieres salir del pueblo con prisa es por la ruta. Si quieres hacerlo de forma lenta y romántica como aquellas grandes historias de amor, es por la salida del rincón”. Las dos salidas. San Marcos Sierras poética. 

CONOCES EL TREN DE LAS SIERRAS?

 


Fuente: RUTAS ONLINE