Cinco Parques Nacionales para recorrer en bici
Los senderos para mountain bike ofrecen paseos saludables y entretenidos para sumergirse en la naturaleza.
Entre bosques de la Patagonia, impactantes paredones rojizos o cientos de palmeras. Con amigos o la familia, en pareja o solos… La bicicleta es una práctica de ecoturismo elegida por muchos viajeros para pasear en contacto con la naturaleza. Y uno de los mejores lugares para vivir esta experiencia a pleno es recorriendo nuestros Parques Nacionales.
Antes de comenzar la travesía en bicicleta y al regresar, es importante registrarse porque con esta simple acción se garantiza la cobertura, en el caso de que llegue a ocurrir algún tipo de percance o emergencia.
A continuación, cinco Parques Nacionales para adentrarse a la aventura y respirar aire puro, recomendados por la Administración de Parques Nacionales (APN).
1- Los Arrayanes, Neuquén. Aquí encontramos un sendero de 12 kilómetros une Villa La Angostura con el Bosque de Arrayanes, a lo largo de la Península de Quetrihué.
Se trata de un camino para maravillarse ante la belleza de la Patagonia y el contraste de los colores de estos árboles, y también disfrutar de las magníficas vistas del lago Nahuel Huapi.
El recorrido se puede realizar en ambos sentidos, siempre teniendo en cuenta el uso compartido de la senda con los peatones y las dificultades que presentan los sectores más empinados.
2- Talampaya, La Rioja. Recorrer en bici este parque, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, requiere más esfuerzo porque el suelo es arenoso en el Cañón de Talampaya.
Los viajeros más deportistas podrán llegar a dos emblemáticos puntos panorámicos: el Jardín Botánico y la geoforma La Catedral.
Este circuito requiere que los participantes se anoten en excursiones guiadas desde la Base Choique, a 13 kilómetros de la entrada. Además, se recomienda reservar con anticipación en la Asociación Civil de Guías del Parque.
3- El Palmar, Entre Ríos. En esta área protegida del Litoral, los senderos son custodiados por cientos de palmeras de yatay. En bicicleta se puede visitar el arroyo de Los Loros, donde se bañan carpinchos y lobitos de río, y llegar hasta un mirador desde el que se aprecian el paisaje natural y los campos aledaños.
El prestador de servicios organiza aquí travesías de hasta 14 ciclistas por grupo, por lo que se sugiere planificar previamente la salida consultando la disponibilidad.
4- Lihué Calel, La Pampa. Puerta de entrada a la Patagonia argentina, este parque invita a recorrer la ecorregión Monte de Llanuras y Mesetas, con parches de Espinal.
También apto para bicicletas, el recorrido se realiza a través del circuito vehicular: comienza en el área de acampe y permite llegar al Sendero de las Pinturas, que conduce a aleros con arte rupestre. En el camino, los viajeros podrán apreciar el Cerro de la Sociedad Científica, el punto más elevado del parque con 590 metros de altura.
Son 24 kilómetros ida y vuelta de dificultad media, lo que equivale a unas tres horas de mountain bike. Pero atención: únicamente se hace con un guía habilitado.
5- Nahuel Huapi, Río Negro y Neuquén. El primer Parque Nacional del país ofrece sendas de distintas dificultades, siempre rodeadas por el encanto de los bosques patagónicos.
Al sur, una travesía de dificultad media invita a recorrer unos 20 kilómetros, paralelos al río Manso. Y en la zona del centro, el viejo trazado de la ruta 237 recorre unos 8 kilómetros de baja dificultad por la margen este del Lago Guillermo, en ambas direcciones.
En cambio, en las cercanías de la ciudad de Bariloche, la senda que comienza en Villa Catedral y culmina en el Lago Gutiérrez tiene unos 10 kilómetros. Pero por las pendientes y curvas, esta última travesía está diseñada sólo para ciclistas con experiencia en bicicleta de montaña.
Fuente: CLARIN.COM